¿En qué momento de la evolución aprendimos a cocinar la comida y dejar de comer carne cruda? Según un grupo de investigadores de la Universidad de Harvard, la capacidad de cocinar y procesar alimentos permitió al Homo erectus, a los neandertales y a los Homo sapiens realizar un gran salto evolutivo que les diferenció de otros chimpancés y primates.
El Paleontólogo Frederick Kyalo presentó en el Museo Nacional de Kenya, los restos de un Homo erectus descubierto en el año 2000 cerca del lago Turkana, en Kenia. El primer antepasado de los humanos modernos que dominaron el arte de la cocina, hace unos 1,9 millones de años.
A partir del análisis de ADN, el tamaño de los molares y la masa corporal de diferentes primates, seres humanos y 14 homínidos extintos, la Academina Nacional de Ciencias ha apoyado este estudio, sugiriendo que el homo erectus pudo haber aprendido a cocinar.
Este estudio se basa en el hecho de que cocinar comida con fuego y herramientas implica un mayor número de calorías consumidas y menos tiempo necesario para rebuscar y comer. Además de una reducción en el tamaño de los molares y un aumento de la masa corporal.
Dentro de los primates, los animales con un mayor tamaño corporal poseen molares más grandes y pasan más tiempo comiendo. De esta forma, los grandes simios de tamaño similar a los humanos pasan cerca de un 50% del día consumiendo calorías mientras que el Homo erectus y el Homo neanderthalensis sólo un 7% (los seres humanos empleamos un 4.7% del día).
De hecho, se sospecha que la habilidad para cocinar puede tener su origen en otras especies que también vivieran en África antes del Homo erectus, como por ejemplo el Homo habilis o el Homo rudolfensis.
En cualquier caso, el estudio confirma que el arte de cocinar y el empleo de sus herramientas se originó en la época del Homo erectus, y antes de que nuestro linaje abandonase África.
Vía | Science News Daily