Tras años de minuciosos estudios, analizando diferentes imágenes y discutiendo en numerosos debates, la localización del próximo aterrizaje en Marte se reduce a cuatro opciones. Es una decisión importante, ya que esta localización puede ser crucial a la hora de decidir si el planeta rojo ha tenido alguna vez las condiciones favorables para la vida microbiana.
Aunque las cuatro localizaciones son buenos candidatos y libres de rocas y otro tipo de amenazas, son destinos bastante diferentes entre sí:
Cráter Gale: Situado cerca del ecuador Marciano, posee un montículo con una altura de 3 Km formado por capas de minerales.
Mawrth Vallis: Es un antíguo canal situado en las altas tierras del Norte muy rico en minerales de arcilla.
Cráter Eberswalde: Situado en el hemisferio sur y contiene los restos del delta de un río
Cráter Holden: Este barranco lleno de depósitos se encuentra cercano al cráter Eberswalde.