El cambio climático obliga a los científicos a desarrollar nuevas variedades de plantas y árboles capaces de resistir el frío, el calor, la extrema salinidad de la tierra, etc. En esta ocasión científicos del Centro Superior de Investigaciones Científicas acaban de desarrollar dos nuevas variedades de almendro y otras cinco nuevas variedades de albaricoquero mediante la selección genética.
Las nuevas variedades presentan características tan especiales como un floración tardía, en muchas ocasiones hemos visto que los almendros han florecido a principios de año augurando una buena temporada y como posteriormente una helada ha acabado con casi toda la floración y por consiguiente, la producción.
Una floración tardía permite eludir casi el total de las posibles heladas permitiendo aumentar la productividad. Otra característica interesante es la posibilidad de sembrar estas nuevas variedades de almendros (Penta y Tardona) en lugares en los que, por ser predominantes las heladas, no se sembraban.
Con respecto a las nuevas variedades de albaricoquero, presentan características similares en cuanto a floración se refiere con respecto a los almendros y según los científicos, los frutos son de una calidad excepcional en todos los aspectos, sus nuevas capacidades permitirán que nuestro país adquiera cierta ventaja en estos cultivos frente al resto de países europeos.
Según los expertos responsables del desarrollo de los árboles, la selección genética realizada ha sido un proceso lento y meticuloso pero en nuestra opinión preferimos esta opción frente a los transgénicos.
Vía | CSIC (Pdf)