Algunos hablan de varios millones, pero resulta muy difícil saber cuántos animales mueren atropellados en nuestras carreteras. Aún así existen remedios naturales para evitar que se acerquen allí dónde existe más riesgo.
Lo primero es buscar el sitio perfecto para poner una sustancia atrayente. En Cantabria, por ejemplo, se buscan pasos de fauna que se encuentren debajo de la calzada.
El atrayente consiste en una brea, importada de Alemania, con olor a madera que atrae a los animales porque les sirve para desparasitarse.
Esta mezcla se unta por las paredes de los pasos de fauna de manera que el animal, al ser atraído, busca esta zona de paso y evita subir a a la carretera.
Juan Antonio Ruiz, técnico del Mº de Fomento, tuvo un accidente con un corzo hace poco más de un año, fue entonces cuando empezó a investigar cómo podrían evitarse este tipo de siniestros.
La propia situación me hizo replantear que hay que empezar a poner solución a este tema de una manera fácil y sobre todo que no fuera agresiva ni para la fauna, ni para los conductores
Declara.
En otros sitio, como en centrales eléctricas, lo que buscan es el efecto contrario, usar repelentes y crear una barrera de olor que impida a los animales acercarse y causar accidentes.
Lo más común es usar una mezcla de huesos calcinados, que aleja a los corzos. Otro mucho más fuerte es la orina de lobo pero se usa sólo en casos extremos porque altera mucho a la fauna.
En temas de repelentes existen muchos tipos de concentrados, por ejemplo, uno hecho con olores de lince europeo, oso, lobo y también de hombre, una mezcla fuertecita que se aplica en las entradas de las autovías.
Con semejantes aromas, ¿qué herbívoros se atreverán a acercarse?
Vía | RTVE