Aunque para muchas personas las arañas sean una de las especies de artrópodos más despreciados, y temidos, éstas han servido como base de diferentes investigaciones, como por ejemplo la que hasta hace poco se ha hecho pública y que indica que las arañas come peces son más comunes de lo que parece.
No es novedad conocer que especies específicas de arañas tienen la capacidad de capturar un pez y comérselo, aunque sí nos interesa el resultado obtenido en la investigación publicada en PLOS ONE, la cual concluye que, en la mayor parte de continentes -excepto la Antártida-, se pueden encontrar arañas que se alimentan de peces, y que además ésta es una práctica más común de lo que se conocía.
Según la investigación las arañas que se alimentan de peces proviene de familias variadas, aunque en su mayoría son del tipo semi-acuático y viven muy cerca de una fuente de agua, sin embargo, aún cuando se conoce la gran variedad de éstas, no se conoce a detalle cómo es que una araña puede atrapar un pez, pero con la investigación por lo menos se tienen pistas de ello.
Según los científicos, las arañas colocan sus patas traseras sobre una roca o planta, mientras las patas delanteras las sostienen sobre el agua, después se quedan quietas, y esperan a que un pez desprevenido nade bajo sus patas para que así, de forma sorpresiva, lo muerdan e inyecten su veneno para matarlo. Una vez muerto el pez lo trasladan a un lugar seco para realizar un proceso químico que le ayudará a digerirlo.
Aunque aún más interesante es conocer, en dicho estudio, que en promedio el pez atrapado por la araña llega a ser 2.2 veces más largo que ésta. Aunque en casos más especiales se pudo comprobar que especies específicas de estas arañas, como las Dolomedes, han podido capturar peces 4.5 veces más pesados que ellas.
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