El cambio climático es ya una realidad: los cambios que experimentan las temperaturas, el nivel del mar y otros fenómenos metereológicos adversos así como la intensificación de las sequías son sólo algunas de las pruebas físicas de un proceso que ya se ha puesto en marcha. Sin embargo, además de la alarma creada por estos primeros cambios en el modelo climático actual y de las nuevas políticas que están impulsando muchos gobiernos, el cambio climático también tiene implicaciones económicas, en algunos casos muy atractivas para ciertas compañías.
Según un informe de Citigroup sobre las consecuencias empresariales del cambio climático, son muchas las empresas que se beneficiarán de las tendencias y oportunidades que está creando esta nueva situación.
Edgard M. Kerschner, jefe del departamento de Investigación de Citigroup Investment y responsable del informe, señala a España como uno de los líderes mundiales en energía eólica pero no como consecuencia de una cuestión social, sino de negocios, ya que el objetivo de cualquier empresa es conseguir beneficios. Kerschner considera que como compañías, han de beneficiarse de los cambios que está provocando la percepción de la nueva situación climática por parte de la gente, los inversores y las propias empresas.
Entre las empresas españolas más beneficiadas se encuentran Acciona, Aguas de Barcelona, Ebro Puleva, ENCE, Gamesa o Iberdrola, según el estudio de Citigroup. Estas seis son las compañías españolas que aparecen en el informe dentro del listado de las empresas mejor situadas en la carrera hacia el liderazgo de las nuevas oportunidades de negocio que trae consigo el cambio climático. Y es que en Europa, según explica Kerschner, la población está muy alerta. A pesar de ello, el 59% de los europeos afirman no estar dispuestos a pagar más por energías menos contaminantes. Es una cuestión, por tanto, con importantes implicaciones económicas, no sólo para las empresas, sino también para los ciudadanos. Según el responsable del estudio de Citigroup, todo lo no contaminante conlleva un coste extra para las empresas que posteriormente también será trasladado a los ciudadanos.
Los sectores más beneficiados por las nuevas regulaciones que se están llevando a cabo como consecuencia de la preocupación de los gobiernos por el cambio climático, serán los de las energías renovables, la generación y transporte de electricidad, y los de construcción e ingeniería, en el caso de las compañías que se dediquen a diseñar y construir las plantas donde se genere energía alternativa o libre de gases de efecto invernadero (nuclear, gas, solar, eólica, etc.).
Vía | El País Más información | Citigroup Más información | El Blog Salmón