En un artículo que ha aparecido publicado en la revista Nature Communications, los investigadores Krupenkin y Taylor de la Universidad de Wisconsin-Madison, describen una nueva tecnología para emplear la energía del movimiento del cuerpo humano y reducir la dependencia de baterías en dispositivos electrónicos.
Tal y como afirma Krupenkin, Profesor de Ingeniería Mecánica:
Los seres humanos en general, son máquinas productoras de energía muy poderosas. Lo que ha faltado hasta ahora es una tecnología que permita transformar esa energía mecánica en energía eléctrica para poder usarla en este tipo de aplicaciones.
En el artículo publicado en Nature Communications, Krupenkin y Taylor describen un novedoso sistema conocido como reverse electrowetting, un fenómeno descubierto por la Universidad de Wisconsin. La energía mecánica se convierte en energía eléctrica mediante el uso de un dispositivo de micro-fluidos basado en miles de micro-gotas de líquido que interactúan con una novedosa nano-estructura de sustrato.
Esta tecnología podría permitir la conversión de energía mecánica en eléctrica a partir de un dispositivo instalado en el calzado, capturando la energía producida por los humanos al caminar (que normalmente se pierde como calor), y conviertiéndola en un máximo de 20 vatios de potencia eléctrica.
El desarrollo inicial de esta tecnología ha sido financiado por una beca de la National Science Foundation Small Business Innovation Research. Ahora Krupenkin y Taylor estan tratando de comercializar este producto a través de una empresa que han creado: InStep NanoPower.
Aunque no es seguro que este dispositivo pueda reemplazar totalmente a las baterías en la mayoría de dispositivos, los investigadores opinan que puede jugar un papel clave a la hora de reducir costes y contaminación en el uso de baterías.
Vía | University of Wisconsin-Madison