En nuestro intento por calcular el peso de una casa, nos quedamos con la idea de que un ladrillo hueco corriente pesa unos 2 kg. Pero necesitamos saber cuántos ladrillos hay en nuestra casa.
Para conocer esa cifra, debemos conocer previamente el tamaño de los ladrillos, para así calcular cuántos ladrillos son necesarios para construir cada metro cuadrado de pared.
Es curioso, pero el tamaño de los ladrillos varía según el país del que hablemos, y en Gran Bretaña ese tamaño ha ido cambiando con el paso del tiempo. De hecho, los ladrillos británicos han crecido. Por ejemplo, los muros de ladrillo del palacio de Hampton Court, en Londres, tienen un aspecto que llama la atención, pues se usaron para construirlos ladrillos de un espesor de sólo 50 milímetros, mientras que los ladrillos actuales miden 65 milímetros de grueso y 225 milímetros de longitud. En una pared de nuestros días, en Gran Bretaña, entran unos 60 ladrillos por metro cuadrado.
Una pared exterior promedio de una casa unifamiliar tiene entre 150 y 200 metros cuadrados. A 60 ladrillos por metro cuadrado: unos 10.000 ladrillos. Peso total: 20 toneladas.
Haciendo cuentas, ya llevamos 50 toneladas de peso total para nuestra casa.
Sigamos con los tabiques o paredes internas, y la cara interior de los muros de carga exteriores, que están provistos de cámara de aire y se construyen a menudo con bloques prefabricados de materiales ligeros:
La superficie de estas paredes depende de cómo se ha diseñado la casa, pero no nos exponemos a un grave error de cálculo si suponemos que la casa está dividida, tanto en la planta baja como en el primer piso, por tres paredes interiores que van desde la parte de atrás hasta la fachada. La superficie total de estas tres paredes, más la cara interior de los muros de carga con cámara de aire, sería de unos 250 metros cuadrados.
Si en cada metro cuadrado hay 10 bloques prefabricados, en total se habrán usado 2.500 bloques. Cada bloque pesa unos 5 kg. Es decir, tenemos otras 13 toneladas, redondeando.
Nuestra casa, pues, ya pesa un total de 63 toneladas. Pero todavía quedan más elementos por pesar.
Nos queda la cubierta:
En los países fríos los techados de las casas no suelen cubrirse con teja árabe como en los países mediterráneos, sino con pizarra o piezas preformadas de hormigón. La técnica constructiva moderna en los países fríos tiende a utilizar materiales de hormigón prefabricado para las cubiertas.
De promedio, por cada metro cuadrado de cubierta encontraremos 25 piezas de hormigón. Cada pieza pesa 2 kg. Es decir, 50 kg por metro cuadrado.
Si la cubierta fuese plana, su superficie sería equivalente a la de la base sobre la que la casa se ha construido, pero las cubiertas de las casas suelen tener una inclinación de unos 30 grados como mínimo, pues de esta manera el agua de lluvia se escurre con mayor facilidad. Con lo cual la superficie de la cubierta de una casa es un 25 % mayor que la superficie de la base, y alcanza en nuestros cálculos hasta unos 70 metros cuadrados.
Resumiendo, al peso total de nuestra casa hemos de añadir 4 toneladas aproximadamente.
Pero aquí no acaba la cosa, todavía quedan algunos materiales por medir, como la madera y el acero, como veremos en la tercera y última entrega de esta serie de artículos.
Vía Cómo los números pueden cambiar tu vida de Graham Tattersall