De nuevo se ha hecho magia en el CERN. Según revela un artículo publicado en la revista Nature Physics, atrapar átomos de antimateria durante más de 1.000 segundos (alrededor de 16 minutos) en el experimento Alpha del Laboratorio Europeo de Física de Partículas (CERN).
Tiempo suficiente para estudiar la antimateria y así averiguar cómo la gravedad influye en ella, algo que no se había conseguido con las efímeras existencias de la antimateria: en cuanto choca con materia se destruye.
Para atrapar los antihidrógenos creados en el acelerador se usa un magnetón que crea una serie de fuerzas electromagnéticas que evitan que choquen con materia. Es lo que los expertos llaman trampa de iones.
Concretamente, los físicos lograron atrapar 300 antiátomos, lo que nos proporcionará, usando láser o espectografía microondas, un mapa preciso del antihidrógeno, para así compararlo con el átomo de hidrógeno. Un átomo de hidrógeno, recordemos, consta de un electrón ligado a un protón, mientras que en el antihidrógeno un positrón (el “espejo” del electrón) está asociado a un antiprotón.
Sólo hubo un momento en el que coexistieron estos dos tipos de partículas de manera natural: durante el Big Bang. Después de ello, la única forma de ver antimateria es creándola artificialmente en un acelerador de partículas.
Vía | Rtve / La Vanguardia