Los jardines pueden ser en sí mismos bellos y bucólicos, pero la mano del hombre puede tunearlos hasta arrancarles nuevos matices, como si entonces fueran los escenarios de algún cuento de hadas. Son bien conocidos los jardines con laberintos artificiales o decorados con arbustos que han sido podados para parecer esculturas de animales u objetos.
Pero si existe un jardín que lleva hasta sus últimas consecuencias esta obsesión por mejorar a la naturaleza o ajustarla a nuestros parámetros culturales o ficcionales, éste es El Jardín de la Especulación Cósmica. Ha sido concebido por el arquitecto y paisajista norteamericano Charles Jencks, y podéis visitarlo en Escocia, en Portrack House, en la región de Dumfries.
Ocupa unas 15 hectáreas y es privado: pertenece a la familia Keswick. Aunque permite el acceso al público en algunas ocasiones.
Dejando a un lado las interpretaciones artísticas que quiere imprimirle al autor a este jardín (caos, los planos cuánticos, los fractales, los agujeros negros y demás), lo llamativo de este lugar es el aspecto de su arquitectura, un cruce entre una pesadilla y parque de atracciones.
Por ejemplo, la misma entrada al jardín se realiza atravesando una puerta denominada Zeroroom, que consiste en un pasillo con sucesivos iconos que se ubican de mayor a menor, desde el Universo hasta la Vía Láctea, a continuación en el Sistema Solar y la Tierra, y por último en el punto exacto de Escocia donde os encontráis vosotros. Como si fuera un viaje desde los más remotos confines del universo hasta el parque.
En un estanque también se ha recreado la sopa primigenia que dio origen a la vida en la Tierra. En una zona, llamada el rincón del ADN, se alude a la teoría del gen egoísta planteada por el científico Richard Dawkins en su obra El gen egoísta, la cual postula que el ser humano simplemente es un vehículo para los genes, y que éstos nos manipulan para sus propios fines, sobre todo reproductivos.
También hay una escalera zigzagueante que progresivamente se va ensanchando, cuya metáfora, por más que la leo, no logro entender (así que me ahorro escribirla). También hay sitio para un ondulante camino de listones que culmina en un puente oriental: el aleteo de una mariposa en un lugar del mundo puede generar un huracán en la otra punta del mundo, gracias a la teoría del caos.
Sitio Oficial | Charles Jencks