Los canarios que los mineros llevaban para detectar la presencia de gases tóxicos en las galerías han pasado hace tiempo, y en todos los sentidos, a mejor vida. No es que no hayan salvado a muchos mineros de la muerte, sino que no son un sistema fiable al 100%, y los accidentes se producían igual. Con el paso del tiempo, la electrónica y el progreso introdujeron sensores de gas y botellas de oxígeno con el fin de reducir la mortalidad por escapes de gas en el subteráneo, pero los accidentes siguen ocurriendo.
Por este motivo ha surgido la pregunta de si podría los entrenamientos mediante realidad virtual o la robótica salvar vidas allá abajo en la mina. La respuesta, según William "Red" Whittaker, profesor de robótica de la Universidad Carnegie Mellon en Pittsburgh, Pennsylvania, es afirmativa, y cree que la situación actual es favorabe para utilizar más los robots, por ejemplo, para rescate. Además, robots equipados con cámaras de video y sensores de gas podrían comprobar las galería de primera mano y sin riesgo de muerte, o bien podrían colarse por sitios imposibles para los operadores humanos para participar en un rescate.
Sin embargo, los robots aún no pueden hacer nada de eso, ya que no están certificados, no son estándar y tampoco han sido desarrollados completamente, todavía está lejos el momento en que entren en la mina.
En cuanto a la realidad virtual, Larry Grayson, profesor de ingeniería de minas, afirma que es un campo prometedor en la búsqueda de seguridad en las minas.Algunas compañías de software han desarrollado simuladores en los que los operarios se enfrentan a situaciones típicas en la mina, y a situaciones de riesgo. En principio, los simuladores tendrían como objetivo reducir el tiempo y los costes de entrenamiento con la maquinaria real, pero también pueden ser utilizados para plantear situaciones hipotéticas a los trabajadores, que deberán resolverlas con la ventaja de no poner en peligro su integridad física.
Una de las cosas que cualquier minero debe saber es qué hacer cuando ocurre un escape de gas, o cómo reaccionar ante un fallo crítico en la maquinaria, que pueda implicar, por ejemplo, desprendimiento de piezas o contenedores. Gracias a los programas de simulación, puede ponerse en situaci´n a los trabajadores, y también pueden evaluarse las reacciones ante estos peligros, en principio virtuales. Al fin y al cabo, en situaciones reales serán ellos los que tengan que tomar decisiones que pueden salvarles la vida, o no...
Vía | "National Geographic":http://news.nationalgeographic.com/news/2006/01/0127_0601227_mines.html?source=rss