No, no es el protagonista de una película de serie B de ciencia ficción irradiado por rayos gamma sino un insecto real, el weta gigante, el insecto más grande del mundo.
No en vano, pesa 71 gramos con unas alas que tienen una envergadura de 18 centímetros: es decir, pesa más que un pequeño rodeor y es más grande que muchos pájaros. La foto que encabeza el post fue tomada por un entomólogo aficionado en la isla Little Barrier, en Nueva Zelanda.
Los wetas son de la orden de los ortópteros (Orthoptera) de hábitos nocturnos y originarios de Nueva Zelanda. Además, durante el tiempo frío en el cual la temperatura se encuentra debajo del 0°C, los wetas hibernan en un estado de supensión animada en el cual pese al total congelamiento de su cuerpo y la desaparición de signos vitales.