El Día Mundial de la Lucha contra el Sida se conmemora el 1 de diciembre de cada año, y se dedica a dar a conocer los avances contra la pandemia de VIH/sida causada por la extensión de la infección del VIH. A propósito de ello, Xataka Ciencia ha tenido la oportunidad de charlar con Ferran Pujol, miembro del Comité de expertos de la Plataforma VIH en España, director de la ONG Projecte dels NOMS-HISPANOSIDA que gestiona BCN Checkpoint.
BCN Checkpoint es un centro comunitario de detección del VIH y otras Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) pionero en España, que permite realizar la prueba del VIH al momento. Con la colaboración del Departamento de Salud de la Generalitat de Catalunya, introdujo en 2006 por vez primera en España el uso de la prueba rápida de detección del VIH en centros no médicos, y desde entonces presta sus servicios de forma gratuita, anónima y confidencial.
Su actividad está dirigida a hombres gais y otros hombres que tienen sexo con hombres (HSH), que representan el principal grupo en riesgo de infección por VIH y otras ITS, así como el único grupo de población en el que la infección aumenta, representando el 42,5% de todos los casos recogidos en nuestro país, según datos del Plan Nacional sobre el sida (MSPSI).
Sobre la clase de asistencia psicológica proporciona BCN Checkpoint a sus usuarios, Pujol nos comunicó que se basa en el "consejo asistido entre pares", es decir, que si una prueba sale positiva, el usuario "será atendido por otro hombre con VIH a fin de paliar los efectos emocionales del afectado". Por supuesto, cualquier positivo "necesita la reconfirmación", e incluso hasta que ésta llegue, la asistencia emocional resulta crucial.
La prueba rápida de detección del VIH en centros no médicos supone una ventaja en la detección precoz de la infección. Pero ¿qué ventajas supone la detección del VIH en una infección reciente? ¿En los estadios iniciales del contagio ya se puede seguir alguna clase de tratamiento? Pujol sostiene al respecto que es de todo punto ventajoso una detección temprana y, también, un tratamiento temprano. En el primer caso, para "evitar contagiar a otras personas". En el segundo, los tratamientos "tienen un perfil de toxicidad más que aceptable", de modo que ya no existe motivo para tener controlado la carga vírica desde el principio.
En ese, la esperanza de vida para un infectado por el VIH que ha tenido una detección precoz y un control de la infección, podríamos afirmar que su esperanza y hasta su calidad de vida pudiera ser "equivalente al de una persona sin VIH en términos generales". Pueden desarrollarse más habitualmente otras enfermedades, vinculadas con el Sida, "como algunas enfermedades cardiovasculares", pero si el paciente se cuida su esperanza de vida puede ser más que aceptable.
Finalmente, si bien el hallazgo de una cura para el Sida resulta todavía un supuesto remoto, hay esperanzas depositadas en alguna clase de vacuna para evitar nuevos contagios, aunque "poner una fecha para su desarrollo todavía es aventurado".
Cada año, en Catalunya, las ONGs realizan alrededor de 6.000 pruebas del VIH, la mitad de las cuales se llevan a cabo en BCN Checkpoint. De esta manera, el centro consigue detectar cerca del 40% del total de los casos de VIH entre la población HSH que anualmente se notifican en Catalunya, tratándose en gran parte de los casos de infecciones recientes. Por otra parte, el centro consigue una derivación al sistema sanitario del 95% de los casos detectados en el mismo, lo que demuestra que un enfoque comunitario es fundamental en las políticas y estrategias de detección y prevención del VIH.
BCN Checkpoint se ha convertido en los últimos años en un centro de referencia a nivel internacional que ha propiciado la puesta en marcha de centros similares en países como Francia y Portugal, y cuya experiencia representa un ejemplo de buenas prácticas para otras comunidades autónomas que quieran desarrollar medidas eficaces y coste-efectivas en el abordaje de la detección del VIH. Ya son varias las comunidades autónomas donde se puede acceder a la prueba del VIH a través de diversas ONGs, como es el caso de Andalucía, Aragón, Baleares, Cataluña, Extremadura, Comunidad de Madrid, Galicia, Murcia, País Vasco y la Comunidad Valenciana.