Generalmente no llevamos nuestro DNI estampado en la frente, así que, si nos preguntan la edad, puede surgir la tentación de mentir. Y la mentira se verá reforzada con el maquillaje, el botox y un peinado favorecedor. Por ejemplo, tengo una tía que lleva una década cumpliendo 42 años. O al menos eso dice ella.
Pero, al igual que los árboles revelan su edad si contamos los anillos formados en el interior de su tronco, nuestra saliva lleva escrita nuestra edad. Si queréis saber la edad de verdad de alguien, no lo dudéis: que escupa. O someted una muestra de su saliva a un test desarrollado por Científicos de la Universidad de California (UCLA).
Eric Vilain, profesor de genética humana de la UCLA y coautor del estudio que publica la revista Public Library of Science (PLoS) ONE:
Analizando sólo la saliva podemos saber la edad de una persona sin conocer nada más sobre ella.
Concretamente, se predecir correctamente la edad de una persona con un margen máximo de error de 5 años.Y todo gracias a un proceso llamado metilación, es decir, una modificación química de una de las cuatro piezas básicas que forman el ADN, la citosina. Al parecer, los patrones de metilación cambian a medida que envejecemos, provocando de esta forma enfermedades relacionadas con la edad.
Los investigadores usaron muestras de saliva enviadas por 34 pares de gemelos idénticos entre las edades de 21 y 55 años. Buscaron el genoma de los hombres e identificaron 88 lugares en el ADN que de manera poderosa correlacionaba la metilación con la edad. Posteriormente pudieron replicar su experimentos en 31 hombres y 29 mujeres entre 18 y 70 años.
El método se está dando a conocer como la edad ADN o simplemente la bio-edad. El proceso todavía tendrá que estudiarse un poco más para ser utilizado por los forenses en las investigaciones de crímenes. Por ejemplo, a la hora de determinar la edad de un sospechoso.
Además se plantea la posibilidad de que en un futuro esta prueba pueda calcular la edad biológica de una persona, diferente a su edad cronológica.
También podrían evaluar el riesgo de sufrir enfermedades vinculadas al envejecimiento en una prueba médica rutinaria basándose en la edad biológica del paciente, que es “la edad real del ADN” según Vilain.
Vía | Popsci / Encuentro29