Un proyecto europeo liderado por el Instituto de Salud Carlos III (España) probará si un compuesto que se extrae del olivo tiene propiedades que podrían frenar la acción del virus del sida, evaluando si esta molécula es eficaz en animales, sentando las bases para realizar ensayos clínicos en humanos.
El aceite de oliva no solo tiene innumerables propiedades beneficiosas, sino que también contiene pequeñas cantidades de hydroxytyrosol, el más potente antioxidante natural que se conoce hasta ahora. La empresa biotecnológica española Seprox ha sido la encargada de descubrir un mecanismo que permite sintetizarla fácilmente (y a un coste asequible) en el laboratorio para emplear un derivado químico (y no el compuesto natural directamente), y se piensa que pudiera tener efectividad como agente antiinflamatorio y antiviral, tal y como explica José Alcamí, coordinador del proyecto:
Se trata de una sustancia totalmente nueva y pionera tanto por su mecanismo de acción como por su estructura química molecular. Combina dos mecanismos diferentes frente al VIH: la actividad antiviral directa y la antiinflamatoria; esta última reduce la capacidad del virus para infectar los linfocitos en las mucosas.
La molécula podría convertirse en una nueva alternativa terapéutica para combatir el VIH que se emplearía en zonas en las que por el contexto social el uso del preservativo no es generalizado.
Vía | El Mundo