El Pentágono lanzó el pasado jueves 11 de agosto el Falcon HTV-2, el avión más rápido jamás construido. Sin embargo, se perdió el control de la aeronave en la fase de vuelo y, según los datos iniciales, el aparato se hundió en el Océano Pacífico.
El Falcon HTV-2, impulsado por un cohete desde la base aérea de Vanderberg (California), recogió datos durante más de nueve minutos hasta que una anomalía causó la pérdida de la señal, informó en un comunicado la Agencia de Investigación de Proyectos Avanzados de Defensa de EEUU (DARPA).
Recordemos que el modelo Falcon HTV-2 es el avión no tripulado más rápido de la historia. Hablamos de un avión que podría volar de Nueva York a Los Ángeles en menos de 12 minutos, o bien de Londres a Sydney en menos de 1 hora.
Vía | EFE