Más de 6000 cráneos humanos han sido analizados en la Universidad de Cambridge para llegar a la conclusión de que el ser humano moderno proviene de un único punto del continente africano, arrebatando la razón a las teorías que dicen que el paso de Homo herectus a Homo sapiens se produjo simultáneamente en varios puntos del globo.
Los resultados obtenidos por el equipo del Dr. Andrea Manica aparecieron ayer en la revista Nature y nos habla de que la población humana actual desciende de un único grupo de Homo sapiens que evolucionó en África.
Han llegado a esta conclusión mediante la realización de estudios de diversidad genética en cráneos procedentes de 105 poblaciones de todo el mundo, descubriendo que las variaciones fenotípicas eran mucho mayores en el sureste de África que en el resto del mundo y que, además, las diferencias disminuían cuanto más se alejaban de esa parte del mundo.
El equipo intentó localizar otro foco similar al del sureste africano sin resultados, circunstancia que da más fuerza a sus conclusiones.
Sus autores defienden que, con este estudio se alcanza la respuesta definitiva al eterno debate acerca del origen del Homo sapiens. Claro que, ¿qué otra cosa podrían decir?
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