Se han hallado evidencias directas de que la fusión de galaxias puede formar galaxias de disco, y no solo galaxias elípticas, como se creía hasta ahora. Y esto lo sabemos gracias a ALMA (Atacama Large Millimeter/sub-millimeter Array), el telescopio ubicado en Chile. El estudio, publicado en la revista Astrophysical Journal Supplement, podría explicar por qué hay tantas galaxias espirales como la Vía Láctea en el universo.
Las galaxias de disco (incluyendo las galaxias espirales como la Vía Láctea y las galaxias lenticulares) se definen por regiones en forma de rosca formadas por polvo y gas, y son distintas de la categoría de galaxias elípticas.La investigación ha sido dirigida por Junko Ueda, astrónomo de la Japan Society for the Promotion of Science.
Vía | Sinc