Los resultados de la sonda Norteamericana Deep Impact, cuya misión era estrellarse contra el cometa Tempel 1, el 4 de Julio del pasado año, muestran que existe agua en forma de hielo en la superficie del cometa. Ajustando los patrones de brillo de las imágenes y realizando pruebas con luz ultravioleta e infrarroja, los científicos de la Deep Impact probaron la existencia de hielo en la superficie de los cometas.
Si bien este hielo no se encontraba justo en el lugar del impacto, estaba próximo a este, y según las informaciones del equipo de científicos, cubre el 0.5% del cometa, cantidad de hielo que es insuficiente para explicar la larga cola de vapor de agua (y otros elementos) que arrastra un cometa, por lo que se supone que este vapor puede venir de partículas de hielo existentes debajo de la superficie del cometa, en cantidades suficientes como para mantener la cola.
Vía | Sondasespaciales