En 2015, durante la inmersión más profunda de la nave Cassini en la columna que emana de las grietas en la región polar sur de la luna saturniana Encelado, los instrumentos detectaron hidrógeno molecular.
Los resultados se detallan en un artículo publicado en Science por Hunter Waite y sus colegas del Southwest Research Institute, en San Antonio. Las reacciones hidrotermales entre las rocas calientes y el agua en el océano bajo la superficie helada de la luna, en su opinión, son la única fuente plausible de este hidrógeno.
Vida en la luna de Saturno
Encélado es un satélite de Saturno que apenas mide 500 kilómetros de diámetro. Está cubierto por una corteza helada, de unos 30 o 40 kilómetros de grosor.
Los investigadores sugieren que el material de vapor y partículas a través del que Cassini voló contenía hasta un 1,4 por ciento en volumen de hidrógeno molecular y hasta un 0,8 por ciento de volumen de dióxido de carbono, ingredientes críticos para un proceso conocido como metanogénesis (generación de metano), una reacción que sostiene a los microbios en la profundidad de la tierra.
Es decir, que podría haber una alta probabilidad de existencia de vida en Encélado, aunque todavía es aventurado afirmarlo: aún no se ha detectado la presencia de azufre y fósforo, dos elementos fundamentales para los organismos.
Ver 2 comentarios