La NASA acaba de dar comienzo a las pruebas del futuro cohete Ares I, que se empleará para impulsar a las nuevas naves espaciales que se utilizarán para enviar astronautas a la Luna y que sustituirán a los actuales transbordadores.
Los transbordadores aún deben realizar 10 misiones a la Estación Espacial Internacional (ISS) y otra para reparar el telescopio Hubble a finales de este año, antes de ser retirados en 2010 y sustituidos por el programa Constellation, que utilizará las naves Orion impulsadas por el citado Ares I.
El Ares I también podrá llevar astronautas hasta la ISS en la primera etapa de un futuro viaje para el retorno del hombre a la Luna, previsto para el 2020.
Las primeras pruebas del Ares se han centrado en los procesos para cargar el combustible que se utilizará en los cohetes. Para abril de 2009, la NASA tiene prevista la primera prueba de vuelo no tripulado con el Ares I.
No obstante, antes de estas primeras pruebas de vuelo, los ingenieros de la NASA tendrán que determinar las formas más seguras de cargar combustible en el cohete.
De momento se han centrado fundamentalmente en los tanques de helio, para determinar cómo reaccionarán bajo presión, aunque se han probado también los tanques de titanio que albergarán combustible superfrío y oxidante.