A lo largo de su incansable periplo alrededor del Sol, en órbita alrededor de sus polos, el satélite que forma parte de la misión conjunta entre la ESA(European Space Agency) y la NASA(National Aeronautics and Space Administration), Ulysses, ha revelado interesantes datos acerca de la actividad solar en forma de radiaciones electromagnéticas en esas regiones de la estrella.
En diciembre pasado, a pesar de estar muy próximo al punto mínimo de su ciclo de manchas solares, el Sol ha sido capaz de demostrar una liberación extraordinaria de energía en forma de radiación electromagnética. Que esto ocurra en esos momentos del ciclo solar es bastante sorprendente,pero lo es más aún que las ondas electromagnéticas hayan sido detectadas por Ulysses a su paso por la "vertical" del polo Sur del Sol, un lugar donde no deberían poder medirse. Las tormentas solares suelen producir grandes cantidades de radiación que son detectadas por los satélites cercanos a la Tierra, pero la particularidad de este fenómenos es que fueron detectadas a distancias en torno al triple de lejos, y en una dirección que no es la que se supone se desplazan estas ondas.
Este tipo de radiación fue observada ya en 200-2001, en el máximo solar, cuando la sonda Ulysses pasaba por la vertical del polo norte solar, pero detectarlas en su mínimo no entraba dentro de lo previsto. Richard Marsden, Project Scientist y Director de Misión del proyecto Ulysses afirma que "las partículas cargadas deben seguir a las líneas de campo magnético, y el patrón de campo magnético del Sol cerca del mínimo solar debería hacer mucho más dificil a las partículas moverse en latitud".
Cada once años se completa un ciclo solar, que es el tiempo que transcurre entre dos mínimos de actividad electromagnética en la superficie del Sol (o dos máximos). Las manchas solares están presentes en buena cantidad en un máximo del ciclo solar, pues son regiones de altísima actividad magnética, en donde la convección está inhibida y por ello resultan visibles. Las manchas solares provocan la subida de las temperaturas en la corona solar, provocando las conocidas erupciones solares.
Por eso es tan extraño saber de la detección de las partículas en la región por la que transita Ulysses.
Pero eso no es todo, ya que la sonda ha constatado diferencias en las temperaturas de ambos polos, hecho este que queda pendiente de confirmación para cuando Ulysses pase por la vertical del polo norte solar. La diferencia de temperatura entre ambas regiones polares se cifra en torno al siete por ciento, algo que puede verse en el registro que os mostramos en la imagen de arriba. Aunque resulta algo forzado afirmar que estas diferencias son permanentes, al menos con la siguiente medición sabremos que no ha sido casual.
Vía | ESA Space Science En Genciencia | El Ulysses marca otro hito en la observación