Para volar sin peso basta con volar en parábolas en el espacio aéreo reservado a bordo de un avión modificado 727, descendiendo de forma controlada para que en su interior se consiga un estado similar al de la caída libre en el vacío. Esta maniobra permite simular un efecto de microgravedad. Cada experiencia de ingravidez dura unos 30 segundos. Lo suficiente para jugar un poco.
30 profesores lanzan aquí 2.000 pelotas de ping pong en la gravedad cero como parte del Weightless Flights Northrup Grumman Fundación del programa Discovery.
El vuelo parabólico se utiliza habitualmente para entrenar a los astronautas que viajarán más adelante al espacio.
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