Como si estuviera recién salido de una novela de ciencia ficción ambientada en Arrakis o en un mundo de fantasía tipo La historia interminable, esta nueva especie de gusano de los barcos (o bromas) descubierta en un río de Filipinas basa su dieta en comer roca caliza en lugar de madera, como es habitual en esta clase de bivalvos... y luego excreta arena.
El hallazgo ha sido descrito en un estudio publicado en Proceedings of the Royal Society B.
No evolucionó de sus parientes bromas
Los gusanos son pequeños, del orden de 150 milímetros de largo. También son blancos y se parecen más a los gusanos que a otros moluscos. No evolucionó a partir de sus parientes que comen madera, sino que probablemente se separaron de ellos hace mucho tiempo.
El gusano de los barcos es un bivalvo descrito y bautizado por Carl von Linneo en 1758. El adulto coloniza las maderas sumergidas: cascos de naves, buques, pilotes, postes, árboles, troncos... creando una galería de 30 cm donde pasará el resto de su vida. Se alimenta de la madera que desmenuza, pero se nutre principalmente, como la mayoría de los bivalvos, filtrando el agua que circula en su organismo por medio del sifón situado en el extremo posterior de su cuerpo.
A diferencia de éste, el nuevo gusano que come rocas no parece hacerlo para obtener nutrientes de ningún tipo: se sospecha que satisfacen sus necesidades nutricionales gracias a las bacterias que viven en sus branquias, aunque no han descartado la posibilidad de que los alimentos se introduzcan en su sifón.
Hasta ahora no se han conocido los primeros detalles del proceso físico-químico del proceso de digestión. Probablemente, las bacterias simbióticas que viven en los cuerpos de los gusanos de barco típicos ayudan a descomponer la madera ingerida en azúcares utilizables.
La nueva criatura ha sido bautizada como Lithoredo abatanica, en referencia al río en el que se produjo el descubrimiento.
Ver 2 comentarios