La mayoría de nosotros corre por el mundo con déficit de sueño. Dormir poco tiene consecuencias negativas para la salud y para nuestro rendimiento en el trabajo. Ahora un estudio sugiere que, además, nos hace feos.
Si bien las ojeras pueden resultar atractivas para algunas personas (ya se sabe, dan un aire de canalla), un estudio realizado por científicos del Instituto Karolinska de Estocolmo y publicado en el último número de la revista médica británica British Medical Journal (BMJ), en que la gente a la que se le priva del sueño por largos periodos de tiempo es menos atractiva.
Popularmente ya se decía aquello de que no hay nada mejor que dormir 8 horas para tener una cara radiante. Pero ahora parece haberse constatado científicamente. Los expertos fotografiaron a un grupo de 23 voluntarios después de que éstos durmieran ocho horas y les volvieron a fotografiar en otra ocasión, pero tras mantenerlos despiertos durante 31 horas.
El experimento consistió en fotografiarlos entre las 2 y las 3 de la madrugada en dos ocasiones. Todos los voluntarios tenían entre 18 y 31 años. No se incluyeron fumadores ni se permitió la ingesta de alcohol en los dos días previos.
Dejando a un lado el sadismo inherente del experimento, las fotografías, que fueron tomadas desde la misma perspectiva y la misma distancia, no dejaban dudas al respecto: dormir poco había vuelto un poco más feos a los voluntarios. Así lo atestiguaron 65 observadores que fueron invitados a ver las fotografías de todos los voluntarios. Su tarea consistió en asignar un puntaje a cada imagen dependiendo del atractivo físico, la sensación de bienestar que transmitían y el grado de cansancio.
Según los científicos del Instituto Karolinska, estos resultados pueden ayudar a los médicos a detectar problemas de salud en los pacientes.
Así que, tal vez, el cuento debería haber dicho: “espejito, espejito, quién es la más bella del reino” / “Duerme un poco más y serás tú”.
Vía | Globomedia
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