En Indonesia se ha descrito una nueva especie de araña llamada Chikunia bilde, que eestá estrechamente relacionada con otra araña llamada Chikunia nigra.
A diferencia de la mayoría de las arañas que son típicamente agresivas y caníbales, a las dos especies de Chikunia les gusta vivir juntas en armonía en grandes colonias.
Controladores de plagas
Debido a su estilo de vida armonioso y su naturaleza no dañina para los humanos, estas especies pueden obrar como excelentes controladores de plagas.
Como les encanta comer moscas blancas que causan estragos en cultivos y mosquitos que transmiten enfermedades y, dado que no se atacan y se comen unas a otras cuando su población crece a altas densidades, podrían ayudar a proteger tanto a las personas como a la agricultura, reduciendo la necesidad de pesticidas.
Según explica Lena Grinsted, del departamento de Ciencias Biológicas de Royal Holloway, y autora del estudio:
Me encontré con esta nueva especie de araña por casualidad mientras estaba en Bali investigando a sus familiares. Sorprendentemente, la nueva especie estaba oculta a simple vista dentro de las colonias de C. nigra. Las dos especies son tan similares que son casi imposibles de distinguir, pero logran mantener sus linajes genéticos separados. La mayoría de las especies de arañas son muy agresivas con otras arañas y viven vidas solitarias y no soñarían vivir tan cerca unas de otras. No solo son inusualmente tolerantes entre sí y con sus parientes cercanos, también son inusualmente tolerantes con la actividad humana. De hecho, parecían preferir los jardines, las áreas de uso agrícola pesado y los vertederos locales, donde los desechos de alimentos y la cría de animales atraían a moscas y mosquitos.