La verdad es que no existe afinidad alguna entre los gatos y los roedores, éstos presentan un pánico feroz aún sin haber visto nunca un gato. Ahora un nuevo estudio revela que se puede eliminar ese miedo y que los roedores se acerquen con toda naturalidad a los felinos.
Investigadores de la Universidad de Stanford han encontrado una nueva fórmula capaz de “reprogramar” el cerebro de los roedores con el microorganismo que provoca la toxoplasmosis. El Toxoplasma gondii es el causante de tal prodigio, una vez que este parásito ha infectado a un roedor y ha alcanzado su cerebro, el miedo es inhibido.
En el estudio realizado, los investigadores pudieron comprobar como el microorganismo se dirigía hacia el cerebro, concretamente se producía una mayor concentración de este patógeno en la zona donde se encuentran vinculadas emociones ,como las agresiones o el miedo.
Este estudio se encuentra vinculado a otros que se habían realizado anteriormente y que mostraban que un ratón infectado con la enfermedad se sentía incluso atraído por los gatos llegando a acercarse lo suficiente como para ser cazado por éste. Casi se podría decir que existe una simbiosis entre microorganismos y el gato, el microorganismo vuelve al gato para poder reproducirse y el gato obtiene su suculento manjar.
Una curiosidad más, el miedo que se pierde es solamente a los gatos, ante otros peligros el roedor actúa de la manera esperada, con miedo y evitando el peligro, quedan todavía estudios por realizar para comprender de qué manera actúa el Toxoplasma gondii en el cerebro de los roedores con tanta precisión.
Los datos obtenidos servirán para complementar otros estudios que relacionan la toxoplasmosis con algunas enfermedades psiquiatricas humanas como la esquizofrenia. El estudio ha sido publicado en Proccedings of the National Academy of Sciences of the United States of America (PNAS)
Vía | El Comercio Digital Más información | PNAS