El ADN mitocontrial es el material genético de las mitocondrias, los orgánulos que generan energía para la célula, y fue descubierto en 1963 por Margit M. K. Nass y Sylvan Nass utilizando microscopia electrónica.
Hasta ahora, sin embargo, nunca se había logado editar esta clase de ADN en plantas, a pesar de que sí se había conseguido en animales: se editó en 2008. Para ello, los investigadores han utilizado una técnica para crear cuatro nuevas líneas de arroz y tres nuevas líneas de colza.
Diversidad génica
En aras de garantizar la diversidad genética de los cultivos y el suministro de alimentos, investigadores de la Universidad de Tokio han editado ADN mitocondrial de plantas. Las mitocondrias contienen ADN completamente separado del ADN principal de la célula, que se almacena en el núcleo.
El genoma mitocondrial animal es una molécula relativamente pequeña, pero el de las plantas es enorme en comparación, la estructura es mucho más complicada, los genes a veces se duplican, los mecanismos de expresión génica no se conocen bien y algunas mitocondrias no tienen genomas en absoluto.
La técnica empleada para conseguirlo, llamada mitoTALENs, usa una única proteína para localizar el genoma mitocondrial, cortar el ADN en el gen deseado y eliminarlo. Según los autores:
Nuestros resultados muestran que los mitoTALEN se pueden usar para modificar de forma estable y hereditaria el genoma mitocondrial en las plantas.
Se espera así usar la técnica para abordar la actual falta de diversidad genética mitocondrial en los cultivos, y así poder evitar que una infección, por ejemplo, alcance todo un cultivo porque comparte el mismo gen. En ese caso, el cultivo con ese gen mitocondrial específico no podría plantarse más, lo que reduciría la diversidad.