Para medir la fiereza de la erupción de un volcán se usa el Índice de explosividad volcánica (IEV), una escala que oscila del 0 al 8, y que se basa en el volumen de material expulsado, la altura de la nube eruptiva y otras variables.
Pero también podemos medir la emisión de calor. En ese caso, la mayor registrada hasta ahora tuvo lugar entre el año 2000 y el 2014.
Kilauea
De 2000 a 2014, el volcán hawaiano Kilauea emitió una energía térmica de 9x8 x 1016 julios, según un es tudio de geólogos estadounidenses y británicos del 28 de enero de 2015, a partir de los datos de satélite sobre los 95 volcanes más activos de la Tierra.
Hasta enero de 2011, la erupción produjo 3,5 km³ de lava, cubrió 123,2 km² de tierra, añadió 206 hectáreas de tierra, destruyó 213 estructuras, y enterró 14 km de carretera bajo lava con un grosor de hasta 35 metros.
Situado a lo largo de la costa sur de la isla, el volcán, con una edad de 300.000 hasta 600.000 años, emergió del mar hace unos 100.000 años