Si bien el chocante enfoque de implantar céllas cerebrales de cerdo en los cerebros de personas que padecen Párkinson para detener el progreso de la enfermedad está todavía en las primeras etapas de la prueba, los resultados iniciales de cuatro personas parecen prometedores.
Gracias a esta curiosa técnica, los cuatro pacientes mostraron alguna mejora 18 meses después de la cirugía.
La esperanza del cerdo
Las personas con enfermedad de Parkinson, que causa temblores y dificultad para moverse, por lo general empeoran con el tiempo. Sin embargo, para cuatro personas participantes en este estudio pionero no fue así.
La enfermedad está causada por la pérdida gradual de las células cerebrales que producen la dopamina, un compuesto que ayuda a controlar nuestros movimientos motores. Los fármacos actuales reemplazan a la dopamina que falta, pero su efectividad desaparece a lo largo de los años. Algo que esperan que no suceda con este nuevo tratamiento realizado por Living Cell Technologies, en Nueva Zelanda, que emplea células del plexo coroideo en cerdos.
El procedimiento es el siguiente: Living Cell Technologies Limited (LCT) desarrolló una microcápsula recubierta con alginato, un polímero natural que se obtiene de las llamadas algas marrones. En el interior, esta cápsula lleva células del plexo coroideo de cerdos neonatales. Estas células de cerdos recién nacidos segregan líquido cefalorraquídeo rico en factores neurotróficos y neuroprotectores, es decir, sustancias que hacen crecer nuevas neuronas y, además, protege a las que ya existen.
Cada cápsula de alginato tiene aproximadamente medio milímetro de ancho y contiene alrededor de mil células de cerdo. En el primer ensayo cada una de las cuatro personas recibieron 40 cápsulas.
Nuevos avances
Loa anteriormente descrito tuvo lugar hace un año, y ahora el experimento acaba de ampliarse a 18 personas en un ensayo controlado con placebo. La esperanza es que los compuestos fabricados por estas células alimenten las restantes células productoras de dopamina en los cerebros de los pacientes. El ensayo controlado con placebo más amplio debería arrojar más luz sobre el asunto. Sus resultados deben presentarse en noviembre.
Por el momento, los nuevos pacientes albergan 120 cápsulas en ambos lados del cerebro.
Pero este enfoque tan llamativo no lo es tanto si tenemos en cuenta que también se está utilizando con células de páncreas de cerdo que se implantan en personas con diabetes. Además, las células cerebrales del cerdo están siendo investigadas como tratamientos para otras enfermedades causadas por la muerte de células nerviosas, incluyendo Alzheimer y Huntington. Al final resultará mucho más cierto, pues, ese dicho de que del cerdo todo se aprovecha.