En una entrada anterior, uno de los editores de Genciencia, desmontaba el tópico según el cual las mujeres hablan más que los hombres.
Si bien, se ha demostrado que hombres y mujeres son iguales en lo que se refiere a este asunto, un nuevo estudio señala las diferencias existentes entre los dos sexos en cuanto al matrimonio y sus efectos sobre la salud.
La conclusión principal del estudio, desarrollado por la Fundación Gaspar Casal, es que el matrimonio afecta positivamente a la salud de los hombres y de modo negativo a la de las mujeres. Así, se ha establecido que los hombres casados y las mujeres solteras son las personas más sanas.
La investigación invita a la reflexión sobre la significación del matrimonio: para los hombres la estabilidad de la vida matrimonial representa una mejora de la salud y la calidad de vida, mientras que para las mujeres representa justamente lo contrario... El estudio parece apuntar que la cuestión de la emancipación de la mujer es un tema todavía por resolver.
Dichas conclusiones forman parte de un trabajo global sobre los determinantes de la salud en el estado español. Otra afirmación, quizás más evidente, derivada de este estudio, relaciona directamente la salud con el nivel de renta, de formación y el tipo de empleo.
Así, los jefes presentan mejor salud que los empleados y las amas de casa y las personas con trabajo estable, disfrutan igualmente de un estado más saludable que los trabajadores en situación de precariedad laboral.
Vía | Diario de León Más información | Fundación Gaspar Casal
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