Los tumores, especialmente los malignos, representan un buen ejemplo de cómo el organismo humano puede volverse contra si mismo y provocar enfermedades e incluso la muerte. Sin embargo, hasta ahora no se sabia el nivel de sofisticación al que puede llegar este ataque.
Los tumores producen gran cantidad de proteínas anormales que utilizan en su desarrollo. Recientes investigaciones han descubierto que estas proteínas no solo facilitan el desarrollo y crecimiento de los tumores. Algunas de ellas parecen ser capaces de manipular el comportamiento de las células del sistema inmunitario haciendo que los ignoren, que dejen de atacarlos y, por tanto, de defender al organismo.
Un estudio del Centro de Investigación del Cancer Fred Hutchinson ha descubierto que algunas proteínas generadas por los tumores modifican el comportamiento de un tipo de linfocito conocido como Linfocito T. Este linfocito es responsable de iniciar y organizar la respuesta del organismo ante un ataque ya sea exterior (virus y bacterias) o interior. Cuando el linfocito entra en contacto con esta proteína su actividad se modifica sustancialmente. En lugar de iniciar los preparativos para atacar al tumor, los linfocitos T envía mensajes químicos que desactivan las respuesta inmunológica del mismo.
Una vez descubierto el mecanismo se espera desarrollar métodos que impidan al tumor generar esta proteina lo que facilitaría una respuesta mas enérgica del nuestro sistemas defensivo y la destrucción del tumor.
Vía | BBC News