Ingenieros de la Universidad de Columbia Británica han desarrollado un nuevo transductor de ultrasonidos que podría reducir drásticamente el coste de los escáneres de ultrasonido a tan solo 100 dólares por unidad.
Su innovación, pendiente de patente, y no más grande que una tirita, puede ser alimentada por un simple smartphone.
Ultrasonidos portátil
Los escáneres de ultrasonido convencionales usan cristales piezoeléctricos para crear imágenes del interior del cuerpo y enviarlas a un ordenador para crear sonogramas. Los investigadores han reemplazado los cristales piezoeléctricos con diminutos tambores vibratorios hechos de resina polimérica, llamados polyCMUT (transductores de ultrasonido micro mecanizados con polímeros capacitivos), que son más baratos de fabricar.
Dado que este transductor necesita solo diez voltios para funcionar, puede ser alimentado por un teléfono inteligente, por lo que es adecuado para su uso en ubicaciones remotas o defícil acceso sin conexión a la red eléctrica. Y a diferencia de las sondas rígidas de ultrasonido, tiene el potencial para ser construido en un material flexible que puede envolverse alrededor del cuerpo para un escaneo más fácil y vistas más detalladas, sin aumentar drásticamente los costes.
Según el coautor del estudio Robert Rohling, profesor de ingeniería eléctrica e informática, a propósito de los usos futuros de esta tecnología:
Se miniaturizar estos transductores y usarlos para mirar dentro de arterias y venas. Podrías pegarlas en tu pecho y hacer un seguimiento continuo de tu corazón en tu vida diaria. Abre muchas posibilidades diferentes.
Ver 1 comentarios