El futuro de la humanidad está en las ciudades: somos demasiados para retirarnos todos en bonitas casas de campo con nuestro propio terreno. Así que el futuro pasa por construir ciudades amigables con el medio ambiente.
Deberíamos tomar buena nota de la ciudad menos contaminada del mundo, y propiciar, por ejemplo, el uso bicicletas y el atajo de los vehículos a motor. El transporte público bien planificado también contribuye a una menor contaminación ambiental: por ejemplo, el 80% de todos los desplazamientos de Hong Kong se efectúan en transporte público, siendo también una de las ciudades con mayor densidad de población del mundo.
La tasa de incremento de la población urbana en el mundo es de 2 personas por segundo. El 12% de la población mundial ya habita ciudades con más de diez millones de habitantes (hay 28 en el mundo). El 54% vive ya en zonas urbanas, y el porcentaje alcanzará el 66% en el 2050.
Algunos proyectos de ecociudades son ciertamente prometedores, como Masdar City, en Abu Dhabi, que será la ciudad más respetuosa con el medio ambiente de todo el mundo: aspira a no generar carbono ni residuos. Toda su energía eléctrica procede de fuentes renovables y todos los residuos se reciclan. El proyecto se inició en 2006 y se prevé que sus seis kilómetros cuadrados acojan a unas 50.000 personas y 1.500 empresas.
Otro proyecto prometedor es el de Tianjin Eco-City, a unos 150 kilómetros de Pekín, China, que será una comunidad de 30 kilómetros cuadrados y que, al inaugurarse dentro de unos diez años, acogerá a unas 350.000 personas (siendo así la ciudad ecológica más grande del mundo).
Un total del 20% del consumo energético de la ciudad procederá de energías renovables, como paneles solares y turbinas eólicas.
El 90% de sus habitantes viajarán en transporte público impulsado con motores eléctricos o híbridos. Y la orientación de los edificios se tendrá en cuenta para que reciban la máxima luz o ventilación natural, reduciéndose aún más en gasto energético.
Si queréis ahondar en el planteamiento de que las ciudades contaminan menos que el mundo rural, no os perdáis: ¿Cómo debería ser el futuro? ¿Megaciudades futuristas o casitas en el campo como la de Heidi?
Imágenes | Flickr
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