Así lo ha afirmado el sindicato CC.OO. en la presentación de su informe anual sobre las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en España, donde se destacó que el resultado es muy bueno, el mejor desde 1990, pero que es necesario que la tendencia se confirme en los próximos años.
Según los datos de este informe, las emisiones de gases de efecto invernadero en España descendieron un 4,1% en 2006, lo que situó el nivel de emisiones brutas en un 48% más de lo permitido por el Protocolo de Kioto. En 2005 el incremento fue del 52%, el mayor desde la firma del tratado.
Todo ello a pesar del importante crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB), del empleo y de la población. Joaquín Nieto, secretario confederal de Medio Ambiente y Salud Laboral de CC.OO., ha resaltado que es la primera vez que se reducen las emisiones en una situación de fuerte crecimiento económico.
El informe mantiene que la reducción de emisiones ha sido posible gracias a las políticas energéticas y medioambientales adoptadas y, sobre todo, a factores coyunturales difíciles de controlar. Entre estos factores destacan el buen año climático, sin grandes olas de calor y frío, las lluvias caídas en zonas con embalses y plantas de energía hidráulica y el aumento de los precios del petróleo y de otros combustibles fósiles como el carbón y el gas.
Entre los factores estructurales, el informe apunta a las influencias positivas que han tenido el aumento de la producción de energía eólica y nuclear. El parque eólico instalado en España ha jugado un papel clave.
Aunque el informe de CC.OO. no hace referencia a la energía nuclear, José Santamarta, director de la edición española de la revista World Watch, reveló que también incidió en la reducción de emisiones de gases, ya que a diferencia de lo que ocurrió en 2005, las centrales nucleares funcionaron a pleno rendimiento en 2006 porque apenas sufrieron parones.
Sin duda una buena noticia, pero que se debe en gran parte a factores coyunturales, por lo que no se pueden lanzar las campanas al vuelo y seguir trabajando en las fuentes de energía renovables y concienciando a la sociedad en el ahorro energético.
Vía | El Mundo En Genciencia | Medidas inteligentes contra el cambio climático