Un grupo de investigadores de la Universitat Jaume I de Castellón ha logrado desarrollar un novedoso catalizador para la activación de enlaces carbono-flúor, un proceso con gran potencial y multitud de aplicaciones industriales. Por ejemplo, su utilización para minimizar la cantidad de CFCs (compuestos Cloro-Fluoro-Carbonados), conocidos como gases de efecto invernadero.
Los CFCs experimentaron un enorme auge en los 80, pero años después se pudo descubrir que destruían la capa de ozono al descomponerse fotoquímicamente cuando llegaban a las capas altas de la atmósfera.
Vía | Universitat Jaume I