Muchas de nuestras ideas no surgen de la reflexión o el análisis ponderado de los datos, sino de la necesidad de conectar socialmente. Es lo que sugiere un nuevo estudio publicado en la revista Royal Society Open Science.
Conexión social
Tres factores impulsan la formación de grupos sociales y políticos de acuerdo con la investigación: la presión social para tener opiniones más sólidas e inequívocas, la relación de las opiniones de un individuo con las de sus vecinos sociales y los beneficios de tener conexiones sociales.
Al unirse a grupos de ideas afines, los individuos también evitan el estrés psicológico o "disonancia cognitiva" de considerar opiniones que no coinciden con las suyas.
Para llevar a cabo el estudio, el equipo desarrolló un modelo matemático que considera cómo las personas reciben información y las presiones sociales que sienten para ajustarse a las opiniones políticas particulares. El modelo ayudó a los investigadores a comprender cómo se forman las divisiones y cómo se intensifican en mayor partidismo y mayor polarización. El estudio, pues, ayuda a explicar cómo las agrupaciones partidistas evolucionan hasta convertirse en extremas, lo que en última instancia da lugar a la formación de "cámaras de eco" en las que las creencias políticas no se cuestionan y aumentan en su fuerza y su radicalidad.
En lo sucesivo, el equipo estudiará cómo la validez de opiniones particulares entra en juego y cuándo la evidencia comienza a importar en la formación de opiniones. Las investigaciones futuras también considerarán la aplicación de múltiples niveles de opinión, profundizando en el mundo de los "sistemas" de creencias en contraste con las creencias individuales.