Pepper es el primer robot fabricado en serie capaz de leer emociones y actuar según ellas. Se trata de androide pensado para el uso personal y que promete revolucionar el uso que le damos a los robots. Pepper tiene un lenguaje corporal que imita al de los humanos y, a medida que conversa contigo, aprende a conocerte y ofrecer una compañía personalizada, todo desde su cuerpo de 1,2 metros de estatura.
Tal y como podéis ver en el vídeo que encabeza esta entrada, Tomomi Ota es una usuaria que ya lleva dos años conviviendo con Pepper. A sus 30 años, esta mujer japonesa es la propietaria de uno de los 200 ejemplares inaugurales de Pepper. Algunas de las actividades que realizan juntos es dar paseos, ver partidos de béisbol e, incluso, rezar en el templo bajo las miradas de sorpresa del resto de personas.
Vía | Sinc