El arcoíris es un fenómeno meteorológico producido por la aparición de un espectro de frecuencias de luz en el cielo. Sucede cuando los rayos del sol atraviesan las gotas de agua que hay en la atmósfera. Por consiguiente, es un fenómeno hipónitco que ha inspirado muchos cuentos y fábulas que en realidad dura muy poco tiempo. Por lo general, esos fenómenos duran menos de una hora.
Sin embargo, hay una excepción. Un arcoíris que se registró en una ocasión que duró casi nueve horas.
Taipéi
El 30 de noviembre de 2017, miembros del departamento de Ciencias Atmosféricas de la Universidad de la Cultura China (Taiwán) observaron un arcoíris sobre Yangmingshan, en Taipéi, China, de forma continuada durante 8 horas y 58 minutos.
Se cree que la cusa de este fenómeno fue la llegada de un viento de la estación de los monzones cargado de agua de mar. Y una velocidad del viento relativamente lenta de 2,5 a 5 metros por segundo.
Nada menos que cuatro son los arcoíris que se avistaron al mismo tiempo durante las observaciones, en las que se tomaron 3.520 fotografías verificadas. Se confirmó así que rompió el récord anterior del arcoíris de mayor permanencia registrado, en Yorkshire, en el norte de Inglaterra, el 14 de marzo de 1994. Ese arcoíris duró seis horas, desde las 09:00 hasta las 15:00, según el Libro Guinness de los Récords.