La piel, que protege a los órganos y sistemas del cuerpo y regula la temperatura y la humedad, es en sí misma un órgano. Un adulto medio está cubierto por unos 2 metros cuadrados de piel.
Sin embargo, estas cifras se quedan muy cortas si las comparamos con nuestros pulmones.
1603 hojas DIN A4
Los pulmones contienen millones alvéolos, que desplegados ocuparían una superficie de 70-100 metros cuadrados. Casi media cancha de tenis. O dicho usando otra analogía: equivaldría a 1.603 hojas DIN A4, un folio de medida estándar.
Cada pulmón adulto suma unos 350 millones de alvéolos, lo que hace un total de 700 millones de alvéolos entre los dos pulmones. Los alvéolos pulmonares son los divertículos terminales del árbol bronquial, en los que tiene lugar el intercambio gaseoso entre el aire inspirado y la sangre.
Útil para las autopsias
Precisamente gracias a los alvéolos, los pulmones son los únicos órganos humanos que flotan en agua, lo cual resulta muy útil en las autopsias: por ejemplo, para confirmar casos de muerte fetal, determinando si el bebé nació vivo cuando sus pulmones pueden flotar en el agua
Respiramos unos 5-6 litros de aire por minuto. Unos pulmones adultos tienen capacidad para 3 litros de aire. El pulmón derecho es más grande que el izquierdo, pues este debe dejar espacio al corazón.
A pesar de toda esta complicación, hace poco tiempo, en la Universidad de Texas Medical Branch (UTMB), en Galveston, desarrollaron por primera vez en la historia un pulmón humano.
Y finalmente, los pulmones son una solución bastante aceptada por la evolución darwiniana para sobrevivir: todos los mamíferos, incluidos los acuáticos, son de respiración pulmonar. Se caracterizan por tener dos pulmones bien desarrollados y divididos en lóbulos.