Nuestra aversión a ciertos olores o sabores es un rasgo evolutivo que nos mantiene a salvo de intoxicaciones. Las cosas que percibimos como asquerosas suelen ser las que resultan peligrosas para nuestra salud. Es nuestra forma de no comernos algo podrido, por ejemplo: los sabores muy amargos suelen asociare con el moho o la podredumbre.
Por esa misma razón, los diseñadores de la Nintento Switch concibieron juegos que sabían muy mal.
Benzoato de denatonio
Los juegos de la Nintendo Switch vienen con unas diminutas tarjetas de memoria que parecen comestibles. En aras de evitar que los niños se las llevaran a la boca, Nintento las recubrió con benzoato de denatonio, un compuesto seguro que que se considera la sustancia más amarga del mundo.
Este compuesto químico se descubrió por casualidad en 1958, gracias al científico MacFarlan Smith. El escocés y su equipo investigaban sobre anestésicos locales cuando descubrieron que el denatonio podría ayudar a acabar con las intoxicaciones accidentales. Fue registrado bajo el nombre de Bitrex.
Por su carácter terriblemente amargo e inocuo para la salud, se usa para evitar que los seres humanos ingieran otros elementos que sí pueden llegar a resultar tóxicos. Productos para el hogar, anticongelantes, champús, productos de jardinería... y juegos de la Nintendo. Por ello, el producto logró que los niños pequeños no se comieran los cartuchos, pero ha animado a los adultos a lamerlos por diversión. No es la primera vez que Nintendo incorpora esta sustancia en alguno de sus productos, pero ha sido en los cartuchos de la Switch en los que ha decicido aumentar la cantidad para que sepan realmente mal y no pueda causar ahogamientos accidentales.
El denatonio también se emplea con frecuencia en las muestras de placebo que se utilizan en los ensayos clínicos, para que el sabor encaje con el amargo de ciertas medicaciones. Y también se añade a algunos productos en aerosol para desalentar el abuso como inhalante de los vapores volátiles.