Ya sabíamos que subir (o bajar) por una escalera era una actividad de riesgo que se llevaba a muchas almas al cielo, y sobre todo a muchos heridos, lo que no podíamos sospechar es que también lo hicieran las sillas. Casi medio millón de personas mueren a causa de ellas. Concretamente por estar demasiado tiempo sentados en ellas.
Es lo que se desprede de un nuevo estudio en el que ha participado la Universidad San Jorge de Zaragoza (España).
El problema del sedentarismo
En realidad, lo que mata de la silla no es otra cosa que el tiempo que ponemos nuestro trasero sobre ella, es decir, permanecemos en una estado fundamentalmente sedentario.
Los investigadores han determinado, con datos de 54 países distintos desde 2002 a 2011, que la fracción de muertes que se puede atribuir al “efecto silla” ronda el 4% en todo el planeta. Más del 60% de las personas en todo el mundo pasa más de tres horas al día sentado y ese tiempo es causante del 3,8% de la mortalidad (unas 433.000 muertes/año).
Incluso una reducción más modesta en el tiempo sentado, del 10% o de una media hora al día, podría tener un impacto inmediato en todas las causas de mortalidad (0,6%) en los países evaluados.
Los valores más altos se encuentran en Líbano (11,6%), Países Bajos (7,6%) y Dinamarca (6,9%), mientras que los más bajos se dan en México (0,6%), Myanmar (1,3%) y Bután (1,6%). España se encuentra en la media con el 3,7% de las muertes de resultas de estar sentados en una silla.
Imagen | andrewmalone
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