Los brotes en las granjas de visones han persistido en el país nórdico, el mayor productor mundial de pieles de visón, así que Dinamarca ha ordenado sacrificar toda la cabaña de visones del país (entre 15 y 17 millones) tras el surgimiento de una mutación de la covid entre los animales que podría transmitirse a humanos y, según el instituto médico nacional, poner en riesgo la vacuna.
El golpe económico es colosal. Dinamarca es uno de los principales exportadores de pieles de visón del mundo y produce aproximadamente 17 millones de pieles al año. Kopenhagen Fur, una cooperativa de 1.500 criadores daneses, representa el 40 % de la producción mundial de visones. La mayoría de sus exportaciones van a China y Hong Kong.
Otros países
Según la Administración de Alimentos y Veterinaria de Dinamarca, se han registrado 1.137 rebaños de visones en Dinamarca, donde hay aproximadamente 12 millones de visones.
La mutación "podría representar un riesgo de que futuras vacunas (contra el COVID-19) no funcionen como previsto", declaró la primera ministra, Mette Frederiksen. "Hay que sacrificar a todos los visones", añadió.
No será posible para los criadores de visones tener animales individuales para que la cría pueda continuar nuevamente en una fecha posterior.
67 granjas de visones ya han matado a sus rebaños, y la matanza se lleva a cabo en colaboración con la policía, las Fuerzas Armadas, la Agencia Danesa de Gestión de Emergencias y la Guardia Nacional.
En Holanda también han decretado acelerar el cierre de granjas al año que viene porque tienen brotes en granjas continuos.
España
En España, los brotes de Covid-19 han afectado a uno de los mayores criaderos, situado en La Puebla de Valverde, Teruel, que se ha visto obligado a sacrificar a toda su cabaña, 92.700 visones, tras constatar que el 87% se había contagiado. Técnicos de Sanidad Animal del Gobierno de Aragón constataron un contagio comunitario masivo por SARS-CoV-2 en los animales tras practicar análisis a varias docenas de ellos.
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