Se sabe que el ejercicio disminuye la inflamación crónica, que a su vez causa muchas enfermedades, como cáncer, artritis y enfermedades cardíacas, pero se sabe poco sobre cómo reduce la inflamación.
En un nuevo estudio, publicado en Gut Microbes, expertos de la Universidad de Nottingham encontraron que la intervención con ejercicio en personas con artritis no solo reducía el dolor, sino que también reducía los niveles de sustancias inflamatorias (llamadas citocinas).
Ejercicio y endocannabinoides
El ejercicio ambién aumentó los niveles de sustancias similares al cannabis producidas por sus propios cuerpos, llamadas endocannabinoides. Curiosamente, la forma en que el ejercicio produjo estos cambios fue alterando los microbios intestinales.
El estudio examinó a 78 personas con artritis. Treinta y ocho de ellos realizaron 15 minutos de ejercicios de fortalecimiento muscular todos los días durante seis semanas y 40 no hicieron nada.
Al final del estudio, los participantes que hicieron la intervención de ejercicio no solo habían reducido su dolor, sino que también tenían más microbios en sus intestinos del tipo que producen sustancias antiinflamatorias, niveles más bajos de citocinas y niveles más altos de endocannabinoides.
El aumento de endocannabinoides estuvo fuertemente relacionado con cambios en los microbios intestinales y sustancias antiinflamatorias producidas por microbios intestinales llamados SCFAS. De hecho, al menos un tercio de los efectos antiinflamatorios del microbioma intestinal se debió al aumento de endocannabinoides.