Tanto a las mujeres que son fumadoras, como a las mujeres que han fumado alguna vez en su vida, se les adelanta la menopausia una media de 22 meses respecto a las mujeres no fumadoras, según un estudio dirigido por Andrew Hyland, del Instituto Oncológico Roswell Park del Búfalo (Nueva York).
En el estudio se evaluaron desde 1991 los registros de salud de 160.000 mujeres posmenopáusicas. También se advirtió que las mujeres que han sido sometidas al tabaquismo pasivo llegaban a la menopausia una media de 13 meses. También se incrementa en un 15% el riesgo de sufrir infertilidad.
Que se adelante la menopausia tampoco es un dato baladí: si la última menstruación tiene lugar antes de los 50 años, entonces es problable una menor esperanza de vida. Y las mujeres fumadoras a las que se les adelanta la menopausia viven 2,5 años menos de media, según un estudio del Instituto Karolinska de Estocolmo.
La OMS aporta datos muy negativos sobre el tabaco, como que unos cuatro millones de personas mueren anualmente en el mundo por enfermedades relacionadas con el tabaco; y que para la década de 2020-2030 podría elevarse a diez millones de muertes por causas relacionadas con el tabaco.
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