Según afirmó Félix Avia, máximo responsable de investigación sobre Plantas Eólicas Marinas del Centro Nacional de Energías Renovables (CENER), durante una conferencia celebrada recientemente en Madrid, la instalación de parques eólicos en el mar permitirá incrementar la potencia eólica instalada, evitando, en parte, los obstáculos de los parques eólicos de tierra. Así mismo, puntualizó que el desarrollo marino es vital si la Unión Europea quiere alcanzar su objetivo de llegar a suministrar el 20% de sus necesidades energéticas con fuentes renovables. Este objetivo se ratificó como de obligado cumplimiento en la última Cumbre Europea de jefes de estado.
Según Avia ya existen regiones en las que se ha alcanzado el techo de capacidad eólica instalable por razones ambientales y de uso del suelo. Por tanto, el desarrollo de parques eólicos marinos en países con costas vírgenes, como es el caso de España, representa uno de los retos más importantes de los próximos años.
Avia también señaló que es innegable que el mar ofrece un mayor potencial de recurso eólico ya que dos terceras partes del planeta son agua. Además, en el mar hay más viento y este es más laminar y menos turbulento que en tierra al no encontrar obstáculos. Estas condiciones permiten que la producción eólica sea más predecible, comparado con la de los parques terrestres, lo que facilita la gestión de la oferta y demanda por parte de los operadores de las redes eléctricas. Además, en el mar, el impacto medioambiental es menor lo que permite abaratar el coste de las máquinas al no requerir condicionamientos tan estrictos.
De los 74.000 MW eólicos instalados en todo el mundo apenas 700 MW corresponden a plantas marinas, todas ellas en el norte de Europa, sobre todo en Dinamarca y Reino Unido. En Londres, se acaba de aprobar un parque eólico marino, el London Array, de 1.000 MW en el estuario del Támesis para facilitar el transporte de la energía de los molinos hasta las viviendas o la industria colindante. Avia ha predecido que las instalaciones marítimas van a comenzar a desarrollarse también en países con litorales costeros profundos, como es el caso de España, si bien no se espera un despegue definitivo de las mismas hasta 2010. Los proyectos existentes en España se reparten entre Cádiz, Huelva, Castellón, Delta del Ebro y Galicia.
Vía | Energías renovables Más información | CENER