Como si el barco fuera un tren que salva accidentes geográficos a través de un túnel horadado en la roca, así es como se piensa facilitar el paso a los fiordos de Molde, en Noruega, que ya ha recibido la luz verde para su construcción.
Túnel para barcos
Las aguas del mar de Stadhavet, en la costa occidental de Noruega, se caracterizan por ser peligrosas a causa de las tormentas. Navegar por ellas, pues, supone un riesgo incluso para las embarcaciones más modernas.
Para evitarlo, el Gobierno de Noruega ha aprobado el proyecto para construir este túnel para barcos de gran tonelaje. Tendrá 1.700 metros de largo, 49 metros de alto y 36 de ancho.
Concretamente, penetrará en una montaña de la península de Molde. De esta forma, los barcos de hasta 16.000 toneladas podrán llegar a los fiordos de la zona sorteando los problemas meteorológicos. No se ha tomado una decisión sobre la velocidad permitida, pero, según las autoridades, será de entre 5 y 8 nudos dependiendo de la nave, de manera que los más rápidos tardarían 10 minutos en salir a la otra orilla.
Se estima que el túnel estará construido en el año 2023 y toda la obra tendrá un coste de 300 millones de euros.