Lo japoneses están locos. Sólo así puedo explicar esta línea de productos basada en un gel que enfría la piel instantáneamente, muy recomendado para estos días de calor pegajoso.
Productos de este tipo no son nuevos, pero se ha experimentado un auge en la demanda de los mismos a lo largo de este verano bajo la filosofía “setsuden” (ahorro de energía), cada vez más inminente en la vida cotidiana de los japoneses. Yendo un paso más allá de los tradicionales aerosoles de enfriamiento, esta innovación fascinante libera una espuma helada que se endurece y se puede envolver la muñeca del usuario o cualquier otra parte del cuerpo.
Los productos tales como Hokkyoku Monogatari (traducido directamente: Cuentos del Polo Norte) ofrecen un método nuevo de enfriamiento. No sólo se pueden transformar en cualquier cosa, desde un reloj de pulsera de hielo a un graffiti pintado en el cuerpo: la espuma de color azul se siente como una bola de papel que, cuando se aprieta, las burbujas de aire se expanden y luego, “pop”, se libera una refrescante brisa de aire fresco.
Ice Spark también es otro buen producto que ofrece una solución similar: se rocía gel que burbujea en la piel del usuario. El crujido es especialmente agradable al oído y el gel se seca después de un par de segundos, sin dejar una sensación pegajosa en la piel. El spray se puede utilizar para diferentes propósitos, tales como un desodorante con olor cítrico.
El negocio del enfriamiento instantáneo y portátil es un negocio tan boyante en Japón que existen líneas de productos tan sorprendentes como las siguientes:
Como el Savanna 50 de Blizzard, sprays que proporcionan -15 grados centígrados al instante para toallas y pañuelos, así como la ropa y el interior de los zapatos.
Geles y barras de hielo también están disponibles para aquellos que no tienen miedo de mojarse.
Gatsby Ice Type tanto para cara o cuerpo también son muy populares entre los japoneses, ya que no sólo actúan como un desodorante de enfriamiento, sino que también limpian la grasa facial.
Lo dicho. Están locos.
Vía | Japan Trends
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