Los trajes espaciales pesan en la actualidad unos 124 kilos, son equipos diseñados especialmente para las caminatas por el espacio, pero ya va siendo hora de renovarlos e incorporar las mejoras oportunas. Esta es la razón por la que los ingenieros de la NASA han empezado a diseñar las mejoras e incorporaciones necesarias a los trajes espaciales.
Debe diseñarse una combinación perfecta, la tecnología más avanzada por el menor coste posible, claro, que combinar ambos conceptos resulta un verdadero problema, por norma general lo tecnológicamente más avanzado resulta también mucho más caro.
Los nuevos trajes serán diseñados por los expertos, pero siempre con la ayuda de los ordenadores, se espera obtener un traje que presente menor peso (unos 90 kilos) y sea más pequeño. De todos modos, hasta que se logre diseñar un traje que permita total libertad de movimientos y la máxima seguridad todavía deberán pasar algunos años.
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