Gracias a Foursquare podemos estar en cualquier calle de cualquier ciudad del mundo buscando algún sitio para comer y enseguida podremos leer las reseñas y recomendaciones de otras personas sobre los restaurantes que nos quedan lejos. Y eso solo ha sido el comienzo. Progresivamente, las apps, usando su poder de colaboración 2.0 aunado con la geolocalización, ha permitido que, entre todos, dispongamos de información acerca de los sitios en los que estamos y sus aledaños: agrandándolos o empequeñeciéndolos, añadiendo detalles, lustres, manchas, suprimiendo tópicos, secretos, enfoques.
Ahora imaginad que podéis aprender cosas de lo que los os rodea. Eso es lo que propone Kolobee, una ‘app’ que nos permite descubrir nuestras ciudades a través de su historia.
Cuando nos acercamos a menos de 200 metros de distancia de una historia (llamados stings en Kolobee), el móvil nos envía una notificación para avisarnos. De camino al trabajo o simplemente mientras paseamos, descubriremos qué hechos históricos ocurrieron en un lugar u otro, qué aspecto tenía un edificio ya desaparecido o dónde vivieron los personajes más célebres, entre otras muchas cosas.
Está disponible en muchas ciudades de España y muy pronto lo estará en todas. Los usuarios de Android ya pueden descargarla y los de iPhone lo podrán hacer a partir de septiembre. Imaginad lo que se avecina con la implantación de las Google Glass o gadgets similares. Con la mejora de calidad del vídeo. Con el 3D. Con los teclados que transmiten sensaciones táctiles, odoríferas o sensoriales en general. Radiografiando el mundo.